Hilda Esther Gutiérrez

Mi nombre es Hilda Esther Gutiérrez, tengo 30 años y soy madre soltera con un niño de 3 años. Vivo en la comunidad de Arenales del municipio de Chinacla en el Departamento de La Paz, Honduras. Me desempeño como promotora productora comunitaria del programa Cosecha Azul. Desde niña he estado vinculada al café apoyando a mi papa en la finca.

Recuerdo que en febrero del 2015 llego un técnico de ASOMAINCUPACO a la comunidad a socializarnos en qué consistía Cosecha Azul. Con mi papa decidimos que valía la pena entrar al proyecto ya que nunca nos habían capacitado o apoyado para que mejoráramos nuestra finca. Nuestra producción como la del resto de los productores se había caído por el daño provocado por la roya.

A los pocos días se me acerco el alcalde municipal con el técnico Danilo Bulnes para consultarme si quería ser promotora comunitaria. Me aclararon que no tendría salario y que solo recibiría un incentivo de 1,500 lps al mes para poder movilizarme a las comunidades. Me comentaron que un mes asumiría la alcaldía el incentivo y el otro mes el proyecto Cosecha Azul. Me motivaron también al explicarme que sería capacitada en todo lo relacionado al buen manejo del café y de la cuenca. Yo sentía que además de criar a mi hijito y apoyar a mi papa en la finca tenía que hacer algo diferente. No lo pensé y acepte de inmediato.

Una vez seleccionada nos reunimos con las comunidades que me asignaron en compañía del técnico de Cosecha Azul. Me presentaron los productores muchos de los cuales ya conocía y les explicaron en qué consistía mi apoyo. Recuerdo que muchos me miraban con asombro quizás por ser mujer.

Durante el primer año del proyecto recibí cuatro talleres de formación en el Centro de Capacitación Jesús Aguilar Paz del IHCAFE en Santa Bárbara. Los talleres duraban toda la semana y los temas que nos dieron fueron relacionados al ciclo productivo del café. El primero fue sobre manejo de tejidos y sombra, el segundo sobre conservación de suelos y fertilización, el tercero sobre manejo de plagas y enfermedades; y el último sobre diagnostico productivo, cosecha y pos cosecha. Recuerdo que también recibí una jornada de agricultura orgánica para lo cual invitaron a un técnico del Instituto Nacional de Formación Profesional (INFOP). Durante las capacitaciones aprendí cosas que el campo no la practicaba.

Una vez capacitada empecé a replicar lo aprendido con los 24 productores asignados de las comunidades de Arenales y Barrio Nuevo. Además de la capacitación visitaba la finca. Con el tema de manejo de tejidos hubo productores que no permitían tocarles el árbol de café. Se habían enamorados al verlos grandes y robustos a pesar de que casi no tenían producción.

Las capacitaciones eran teórico prácticas a través de las Escuelas de Campo. Cada una de estas escuelas tiene un nombre y una junta directiva. Realizamos una sesión al mes y durante las mismas recordamos el tema de la sesión anterior por si quedan dudas; se imparte además el tema indicado, se visita la parcela y se analiza el agro ecosistema.

Realizamos análisis de suelos ya que los productores jamás lo habían realizado y gracias a Cosecha Azul todos los productores lo realizaron conociendo las necesidades del mismo. Una vez realizado estos análisis se mandó a hacer una formula según la demanda de nutrientes del suelo. Esto ha tenido un gran impacto ya que aumento el rendimiento productivo de la finca.

Poco a poco hemos venido recuperando el rubro del café en nuestras comunidades. Con aporte municipal establecimos 2,000 plantas de café por productor de variedades resistentes a la roya y alto perfil de taza como Lempira, IHCAFE 90 y Parainema. Para el establecimiento del vivero la municipalidad aporto los insumos externos, los productores los materiales locales y como promotora le daba asistencia técnica.

Para mí el Cambio Más Significativo que he tenido como resultado del apoyo del programa Cosecha Azul es el conocimiento adquirido. He innovado en la finca y todo lo aprendido lo he transmitido a los productores. Me siento mucho más comprometida con las comunidades que visito y siento que no puedo fallarles.